Piel Radiante con Ayurveda: Cuidado de la piel de dentro hacia fuera

¿Quieres saber cómo cuidarte por dentro y lucir un a piel resplandeciente por fuera después del verano? ¡Sigue leyendo! Te cuento los secretos del Ayurveda y la Macrobiótica para una piel radiante durante la temporada de otoño.

 

Los especialistas en cosmética confirman que una piel sana y jovial empieza con la nutrición adecuada, sin embargo no se trata solamente de lo que comemos, sino de cómo digerimos y cómo tonificamos y estimulamos el funcionamiento de los órganos implicados.

El intestino grueso y el pulmón son los órganos relacionados con la belleza de nuestra piel. Para entender cómo cuidar la salud de la piel, es importante reconocer que este órgano cumple funciones de eliminación, al igual que los pulmones y el intestino grueso. Según la teoría macrobiótica de las 5 transformaciones, éstos son los órganos pertenecientes a la “transformación metal” y la piel, es considerada, el tercer pulmón.

El movimiento “metal” delimita nuestro espacio vital, siendo una frontera permeable que nos separa y comunica a la vez con el exterior. La piel, representa esa frontera que delimita.

La piel se tensa para evitar las influencias no deseadas y se relaja para permitir la penetración de lo que consideramos valioso para nosotros mismos, de ahí que todo lo relacionado con la piel tenga que ver con cómo nos relacionamos con los demás y nuestro entorno.

 

Desde el punto de vista fisiológico, un desequilibrio en la energía del pulmón conlleva una mala oxigenación. La ineficiencia de la energía en los pulmones se puede observar en las mejillas (zonas más oscuras o palidez o granos). Si los pulmones están débiles, la piel puede sufrir descamaciones y estar seca y sin brillo.

El dolor en los hombros está también relacionado con problemas de pulmón. Una postura encorvada hacia adelante, con los hombros caídos hacia delante como queriendo proteger el pecho (p.ej. trabajando en el ordenador) no es nada bueno para los pulmones. Si los pulmones están débiles, sentiremos opresión en la cabeza y el pecho, estornudaremos y tendremos la nariz tapada. La piel también se apaga por la falta de oxigenación.

Por otro lado, un mal funcionamiento del intestino grueso, particularmente estreñimiento, conlleva una piel más apagada porque no eliminamos las toxinas de nuestro organismo, por lo que es muy importante mantener un tránsito intestinal regular y una digestión eficiente.

El pulmón es el encargado de oxigenar la piel y el intestino grueso es básico para desintoxicar el organismo, ya que se encarga del tránsito intestinal.

Gran parte de la sabiduría ayurveda para la salud y el rejuvenecimiento se basa en pautas para mantener el poder de nuestra digestión. Una digestión eficiente promueve un trabajo correcto de los órganos y la eliminación adecuada de toxinas. Este equilibrio dentro se reflejará fuera en la luminosidad y tersura de la piel, la fuerza del cabello y, además, en la actitud.

 

cuidado de la piel por dentro.

Los consejos para nutrir la piel por dentro son alimentos, combinaciones y cocciones que estimulen la energía del pulmón y el intestino grueso. La transformación del metal según al teoría de las 5 transformaciones, a las que pertenecen estos órganos, sucede durante el otoño. Que sientas que tu piel necesita un especial cuidado en esta época del año no es casual. La alimentación de otoño busca generar centro y calor interno. Vamos a ver algunos consejos:

  • Sabor: los alimentos con un sabor ligeramente picante van a estimular el movimiento, la circulación de la sangre y de la energía. Ayudan a despejar dando salida a las toxinas estancadas de los pulmones, la piel y del intestino grueso. Por un lado, unos toques de este sabor nos van a ayudar a despejar y desobstruir las acumulaciones de moco y por otro, nos van a proporcionar más calor, también necesario con la llegada de los primeros fríos. Optar por picantes como: jengibre, rábanos, nabos, daikon, mostaza, wasabi (ideales para climas templados) y evitar los picantes más fuertes como chiles (que se usan más en verano o en climas cálidos para combatir el calor). 

  • Verduras y frutas: para el cuidado de la piel y esta época del año da preferencia a las verduras frente a las frutas, porque las verduras dan más calor y fuerza, sin dejar de depurar y limpiar el cuerpo, que es justo lo que necesitamos para entrar con energía en el otoño. Utiliza con frecuencia raíces como zanahoria, chirivía o boniato, que nos darán dulzor natural, al tiempo que nos ayudarán a calentar y estabilizar el cuerpo en otoño y mantener la salud de los pulmones. Las verduras de color naranja, como las calabazas y las zanahorias son ricas en Beta-caroteno, que es un precursor de la vitamina A, ayudando a restablecer y reparar los tejidos dañados, también protege la piel de los radicales libres.

  • Utiliza con frecuencia cereales integrales como el arroz y mijo: el arroz integral es un gran regulador de la energía y estabiliza la temperatura corporal y sana el intestino. Por su lado, el mijo es reconstituyente y remineralizante. Los cereales integrales son la fuente más eficaz de vitaminas del grupo B, así como las legumbres, estos dos grupos de alimentos son la base de una alimentación balanceada, que no dejan residuos metabólicos y energéticamente aportan integridad y equilibrio. Promueven la renovación celular, mantienen la barrera protectora de la piel y ayudan a prevenir afecciones como el acné, la sequedad y la rosácea. Los cereales integrales son ricos en vitaminas B1 (tiamina), B2 (riboflavina), B3 (niacina) y B6 (piridoxina), fundamentales para la renovación celular, ya que facilitan el metabolismo energético en las células, promoviendo la regeneración y reparación continua. Esto se traduce en una piel más suave, con un tono uniforme y menos propensa a problemas como la sequedad o la descamación. Una dieta rica en estas vitaminas es clave para una piel sana y radiante

  • Hidratación: una buena hidratación no es sinónimo de beber agua. Una hidratación eficiente abarca el agua contenida en las verduras y la utilizada en la cocina. La realidad, es que necesitamos dos litros de líquidos para hidratarnos, no dos litros de agua. Un organismo nutrido con proteína de origen vegetal, se siente atraído energética y biológicamente por cereales integrales en grano, a su vez por verduras de raíz como zanahorias, nabos, colinabos, chirivías, puerros, verduras de mar y de tierra, como las de hoja verde, crucíferas, brócoli, kale, apio, y también por verduras redondas como las calabazas, cebollas, coliflor, rábanos y el resto de verduras de estación. Este equilibrio lleva al organismo a satisfacer las necesidades de dulce con fruta local y de estación lo que crea un organismo bien hidratado con una mínima necesidad de agua adicional y por consiguiente cuenta con la gran dosis de oxígeno proveniente de las verduras. La respiración será más profunda y con una frecuencia más baja. Nutrir un organismo de esta manera es la primera clave para tener una piel saludable y sana, flexible y luminosa.


    El organismo nutrido con base de proteína vegetal, patatas y solanáceas, verduras crudas tipo ensaladas, pan y harinas, es un organismo sediento, que además busca desesperadamente fibra y la obtiene con una ingesta exagerada de agua y líquidos azucarados, resultando unos intestinos igualmente secos propensos al estreñimiento o la inflamación, además de un organismo que respira muchas más veces, más rápido y superficialmente. 


  • Ingesta de ácidos grasos de origen vegetal, antioxidantes y vitamina C y E: La vitamina C junto con la vitamina E son antioxidantes que estimulan la producción de colágeno y mantienen joven la piel. Están presentes en las semillas de lino, de calabaza, en las coles de Bruselas, el brócoli y las coles en general. y esta presente en abundancia en las ciruelas de umeboshi y los fermentos en general.

  • Cocciones: las cocciones por excelencia para el otoño son la kimpira y el nishime, también el salteado largo, las cremas, el vapor, el estofado. Todas ellas son ideales para mantener la piel hidratada desde adentro ya que son métodos de suave y fácil digestión, lo que también apoya la salud digestiva y, a su vez, la salud de la piel.

  • Evitar: alimentos generadores de moco (ya que de por sí, el otoño es una época con mucha tendencia a resfriados) y que colapsen pulmones e intestinos: lácteos, harinas refinadas y azúcares refinados. También generan mucosidades: un exceso de alimentos crudos, frutas tropicales, alimentos fríos, agua fría, helados, exceso de carnes o de avena.

 

Promover una digestión eficiente con ayurveda

Mientras que la medicina moderna acaba de empezar a explorar la importancia de la conexión mente-cuerpo, y el eje intestino-cerebro, la antigua ciencia del Ayurveda ha basado su enfoque del bienestar en este concepto durante miles de años. Para ayurveda NO SOMOS LO QUE COMEMOS, SINO LO QUE DIGERIMOS.

Arraigados en la idea de que la mente y el cuerpo están inextricablemente unidos, los principios ayurvédicos sostienen que cualquier sintomatología es el resultado de algún tipo de desequilibrio en el organismo. Así que no tratamos lo que se ve, sino identificamos el origen a nivel de digestión, metabolismo, tejidos y órganos. Esto incluye mantener una adecuada salud digestiva que requiere un microbioma diverso con muchas bacterias buenas. En base a una digestión eficiente, es más sencillo alcanzar el equilibrio mental, emocional y físico.

Hay dos términos clave relacionados con la digestión ayurvédica. Agni, o fuego digestivo, nos ayuda a digerir todo lo que ingerimos. Ama, o acumulación tóxica, puede crear "malestar" en el sistema y, en última instancia, contribuir a la enfermedad. Cuando nuestro fuego digestivo es fuerte, somos capaces de descomponer eficazmente los alimentos que ingerimos, absorber los nutrientes y eliminar las toxinas. Si el agni es débil, puede provocar una acumulación de ama.

Dado que la buena digestión es la base de la buena salud en Ayurveda, hacer que el proceso digestivo sea lo más fácil posible para tu cuerpo es la clave para que tu belleza natural brille y, esto depende del estado de tu fuego digestivo. Es necesario la valoración por un profesional ayurveda para determinar las pautas que promuevan la eficiencia en tu digestión. Pero podemos seguir una pautas claves:

  • Bebe a sorbos agua caliente a lo largo del día. Éste es uno de los hábitos más fáciles y baratos que puedes empezar a incorporar a tu rutina diaria para tener un intestino sano. Se cree que beber agua caliente a sorbos durante el día ayuda a estimular la digestión, eliminar el ama y estimular el metabolismo.

  • Evita las bebidas frías, sobre todo a la hora de comer. Como una buena digestión depende de avivar el fuego digestivo, beber un vaso de agua helada con la comida puede apagar el fuego digestivo que está trabajando duro para asimilar los alimentos. Sería como intentar encender un fuego echando agua helada sobre los troncos; no será muy eficaz.

  • Tómate tiempo para masticar. El segundo paso de la digestión según el Ayurveda es la masticación. Dedicar tiempo a masticar la comida ayuda a descomponerla para que luego pueda asimilarse fácilmente. También estimula la producción de saliva, que ayuda a producir enzimas digestivas.

  • Disfruta de tu comida más copiosa a mediodía. Puesto que todo está conectado, incluidos nuestro cuerpo y nuestro entorno, es importante tener en cuenta la hora del día a la hora de comer. Un principio ayurvédico afirma que nuestro fuego digestivo es más fuerte cuando el sol está en su punto más alto del día.

  • Come sólo cuando tengas hambre. Aunque es una buena idea hacer tu comida más copiosa a mediodía, el Ayurveda también nos enseña a comer sólo cuando tenemos hambre ayudándonos a identificar con sencillas pautas cuándo hay hambre real y cuando hambre “falsa”.

  • Añade estas cinco especias para una digestión óptima. El hinojo, el cilantro, el comino, el cardamomo y el jengibre se utilizan con frecuencia en la cocina ayurvédica. No sólo ayudan a la digestión en tiempo real, sino que los estudios demuestran que en realidad ayudan al organismo a producir sus propias enzimas digestivas y bilis, ambas necesarias para una digestión sana.

  • Combina los alimentos adecuadamente. Uno de los principios clave del Ayurveda es la combinación adecuada de alimentos. La idea es que cada alimento tiene cualidades distintas, por lo que se digieren de manera diferente. Combinar alimentos con energías incompatibles puede disminuir tu fuego digestivo, o agni, lo que puede provocar hinchazón, gases, indigestión y, finalmente, acumulación tóxica, o ama. Esto lo aprendes de manera clara en nuestros programas personalizados de Ayurveda.

  • Incorpora los seis sabores. La clave de una dieta equilibrada en Ayurveda es incorporar los seis sabores: dulce, salado, ácido, picante, amargo y astringente. Al hacerlo, tu plato estará lleno de todos los nutrientes y grupos de alimentos esenciales. También acabarás sintiéndote más satisfecho, lo que puede disminuir los antojos de picar más tarde.

  • Da un paseo con presencia después de comer. Dar un paseo de tan sólo 15 minutos después de comer puede ayudar significativamente a la digestión, es uno de los hábitos para una buena digestión que recomienda ayurveda.

 

Rituales Ayurvédicos para una Piel Radiante y Resplandeciente

La antigua ciencia del Ayurveda se centra principalmente en la afirmación: "la verdadera belleza viene de dentro".

La rutina de cuidado de la piel ayurvédica puede eliminar los doshas presentes equilibrando todo el cuerpo. La clave principal para acercarse a una práctica holística es incorporar un cierto estilo de vida a tu rutina. Si estás interesada en saber más sobre ayurvéda, recuerda que en Origen, Escuela de Yoga ofrecemos programas de ayurveda personalizados para mejorar tu bienestar, belleza y calidad de vida.

 

Entendiendo tu tipo de piel en Ayurveda

Además de los consejos generales anteriores, es vital conocer tu tipo de piel según el Ayurveda para brindarte los cuidados adecuados. Hay tres doshas que determinan los tipos de cuerpo que son Vata, Pitta y Kapha.

Estos doshas pueden determinar nuestras características psicológicas y fisiológicas. Cada individuo tiene un equilibrio único de tres doshas que determinan las características físicas del cuerpo. Comprender tu tipo de piel puede ayudar a encontrar los cuidados adecuados para su piel para proporcionar un resultado positivo.  

  • Piel Vata: Este tipo de piel es seca y fría al tacto, así como propensa a líneas y arrugas. Generalmente hay tendencia fuerte a la deshidratación, por lo que hay que prestar especial atención a esto. Se recomienda principalmente el uso de aceite de sésamo y humectantes a base de aceite para evitar la exfoliación excesiva. A las personas con piel vata se les recomienda usar hierbas como satavari y ashwagandha en sus mascarillas y productos de autocuidado. Consúltanos en Origen cómo crear tus bases humectántes o sobre cosmética enriquecida con estas hierbas especiales para pieles vata.

  • Piel Pita: Son las más sensibles y reactivas, normalmente propensas a los brotes y rosáceas. El tipo de piel pita se broncea fácilmente, además, siempre debe evitar la cafeína, la sobreexposición al sol y los productos químicos agresivos. La incorporación de hierbas calmantes y refrescantes como el pepino, el sándalo, la rosa y el aloe vera puede tener un impacto positivo en la piel.

  • Piel Kapha: Pueden tener los poros dilatados y la piel grasa, por lo que hay que limpiarla regularmente y exfoliarla. Busca productos naturales para el cuidado de la piel que contengan cúrcuma, albahaca sagrada tulsi y/o neem. Tu piel lo agradecerá.

Para profundizar sobre esto y encontrar cosmética fresca y natural adecuada para ti según tu tipo de piel, contáctanos en Origen para una valoración gratuita.

 

Consejos ayurvédicos para el cuidado de la piel

Después de averiguar tu tipo de piel, podemos equilibrar los doshas para tener una piel sana. ¿Alguna vez te has mimado de forma ayurvédica con productos y rutinas naturales? Los siguientes son algunos de los consejos para iluminar tu piel de manera saludable.

Comienza el día salpicando agua en la cara, a lo que le sigue la exfoliación, la reparación, el rejuvenecimiento, la hidratación y la protección. Tener una rutina que puedas seguir a diario es una mejor manera de preparar tu piel.

 

EXFOLIACIÓN

Diferenciados entre dos tipo de exfoliación dependiendo de la época del año en la que estemos: las friegas corporales son más adecuadas en otoño/invierno. El cepillado en seco en más adecuado en primavera.

  • Friegas corporales:

    • Hay que calentar una olla con agua en el fuego hasta que esté caliente. Si se quiere además estimular la pérdida de grasa se puede rallar un poco de jengibre y escurrir el zumo en esta agua.

    • Lleva la olla al cuarto de baño y hazte con una toalla de bidet o con una manopla de algodón. Hacer las friegas con un guante de crin no lo recomiendo porque la idea es frotar un ratito cada parte del cuerpo, y con el guante de crin "desnudarías" demasiado la piel y la irritarás, además de perder su protección natural. Moja la toalla en el agua caliente y ve frotando cada parte del cuerpo en sentido circular, desde los pies hasta el cuello. Si estás frotando y ves que la piel se pone roja es perfecto, quiere decir que la zona ya está estimulada, pasa a otro lado. Si después de frotar un rato la piel sigue estando blanca, muévete hacia otra zona, es probable que haya acumulación de grasa, con el tiempo verás que se pone roja más pronto.

    • Cuando sientas que la toalla ya no está caliente vuelves a mojarla en la olla y la escurres bien. Comprobarás que cada vez que mojas la toalla en el agua se va “ensuciando”, consecuencia de estar eliminando piel muerta.

      Todo el proceso no debe durar más de 10-15 minutos.

      Una de mis maestras decía que no había que lavar la toalla en varias semanas, pues iría acumulando microorganismos que enriquecerán la microbiota de la piel … ¡Eso ya que sea a gusto del consumidor!

  • Cepillado en seco: se hace tradicionalmente en ayurveda con guantes de seda cruda, toma el nombre de Garshana, y es uno de los rituales de limpieza que aparecen en el Ayurveda como pilares para mantener el organismo libre de toxinas. Promueve la limpieza linfática y es una forma poderosa de apoyar la eliminación de ama (toxinas) del cuerpo.

    Esta técnica se recomienda para las personas con piel tipo kapha, forma parte de las rutinas de nuestros programas de detox de primavera, y es uno de los masajes ayurveda que ofrecemos en Origen, especialmente beneficioso si existe fatiga, lentitud, sensación de embotamiento físico o mental, estreñimiento y un sistema inmune débil.

 

Hidrata tu piel 

En la tradición ayurvédica, se suele hacer automasaje “abhyanga” con aceite tibio, normalmente de sésamo (aunque también depende del tipo de piel y de la época del año). Masajea suavemente sobre la piel con movimientos circulares desde la cabeza a los pies, prestando especial atención a las articulaciones.

Este procedimiento ayuda a nutrir la piel y también fomenta una mejor circulación de la sangre. Abhyanga también puede desempeñar un papel eficaz en la disminución de la fatiga y el estrés emocional, reduciendo los efectos nocivos en la piel.

El masaje Abhyanga y su variante Abhyanga marma (dónde hacemos presión en las líneas y puntos energéticos) son otros de los masajes que puedes conocer en Origen.


Haz ejercicio a diario Preferiblemente yoga

El yoga beneficia la piel mejorando la circulación sanguínea, lo que aporta más oxígeno y nutrientes, logrando una piel luminosa. Reduce el estrés y los niveles de cortisol, que pueden causar acné e inflamación. Las torsiones ayudan a desintoxicar el cuerpo porque estimula los intestinos y los órganos, lo cual favorece a la piel, como ya hemos visto.

El equilibrio hormonal que promueve el yoga también ayuda a una piel luminosa y libre de acné, sebo o imperfecciones. Las técnicas de respiración oxigenan las células, favoreciendo la regeneración. Disminuye la inflamación, lo que previene el envejecimiento prematuro. El yoga también mejora la calidad del sueño, esencial para la reparación celular, y tonifica los músculos, dando firmeza a la piel.

Todos estos beneficios de la práctica de yoga, contribuyen a una piel más saludable y radiante.

Meditación

El Ayurveda dice que el estrés, la piel y los canales de la mente están estrechamente relacionados. Practicar la meditación tiene el potencial de reducir el estrés y mejorar la inmunidad general, lo que puede tener un impacto positivo en la salud de la piel.

 

Recapitulando:

La ciencia ancestral de la salud y el rejuvenecimiento que es Ayurveda enfatiza que seguir una dieta saludable y equilibrada puede asegurarte una piel naturalmente brillante. Junto con varias prácticas, rituales y hábitos, puedes obtener una salud general tanto interna como externamente.

Los rituales ayurvédicos de cuidado de la piel para una piel radiante y resplandeciente, pueden dejar tu piel realmente saludable sin necesidad de hacerte tratamientos tan seguidos, intervenciones o, también pueden apoyar y fortalecer los que regularmente te hagas. Para obtener más información sobre Ayurveda, puede inscribirse en nuestro Programa personalizado de Ayurveda que pueden proporcionarte información valiosa para tu bienestar.

Anterior
Anterior

Renueva tu Energía y Claridad Mental tras las Fiestas: Detox Ayurvédico de Invierno

Siguiente
Siguiente

Refrescar sin enfriar en temporada pitta/verano: 4 recetas de limonada ayurveda